PANDORGO 1998

      Nace en Ciudad Real, el 27 de Abril de 1951, en el seno de una familia de trabajadores que residían en el barrio “Puerta de Santa María”, en la calle “Los Infantes”. Es el octavo hijo de Miguel Patiño y de Sagrario Córdoba, casado con Manuela García Melero.
        Cursó sus estudios en el colegio “Carlos Eraña”, situado en el Barrio de Santa María y que fué sede durante algún tiempo del Excmo. Ayuntamiento de Ciudad Real, del que guarda gratos recuerdos.
        En el año 1964, con trece años, comienza a trabajar como aprendiz de camarero en el “Bar El Quijote”, situado en la entonces llamada Plaza del Generalísimo, de Ciudad Real. Tres años después cambia de empresa, comenzando a trabajar en el “Bar Ideal”, trabajando también en el bar del mercado ayudando a su amigo Ramón.
        En Enero de 1973 es llamado a prestar el servicio militar en el Cir., nº1 en Colmenar Viejo en Madrid. Es licenciado en Marzo de 1974. En Septiembre de ese mismo año contrae matrimonio con Manuela García, instalando su hogar en el barrio de Santiago Apóstol (Perchel). Fruto de ésta unión nacen tres hijos Ángel Manuel, David y Sonia.
        De 1977 a 1983, trabaja como transportista en la empresa creada por su hermano, dando así un vuelco a su orientación laboral.
        En 1984 crea su propia empresa de transportes a la que denomina “Transportes Angel Patiño” la cual consigue levantar a base de esfuerzo, ya que todos los miembros de su familia estan relacionados en mayor o menor medida con la empresa.
Por aquellos años se fundó la Peña “El Dinosaurio”, de la cual fué socio fundador. Participa en todos los acontecimientos y fiestas relacionadas con las Peñas y el Ayuntamiento, haciendo gala siempre de su tradicional traje o blusa y garrota. En 1998 fué propuesto por su peña para ser nombrado Pandorgo, siendo ratificado para tal honor por la Hermandad de Pandorgos y el Excmo. Ayuntamiento el 31 de Julio de dicho año, convirtiéndose en una de las mayores satisfacciones y alegrías de su vida ya que para él supuso un orgullo poder representar a su tierra, su pueblo y por supuesto a su Patrona y la de todos los ciudadrealeños, la Santísima Virgen del Prado.
        En las navidades de ese mismo año fué nombrado representante en Ciudad Real del Rey Gaspar, guardando sólo recuerdos maravillosos de esos momentos vividos, tales como la imagen de las caritas de los niños al verlo llegar a la Estación del AVE, la entrega de juguetes y regalos en los hospitales y asilos.
        Sus deseos para el futuro de Ciudad Real son que se lleven a cabo los proyectos de expansión tales como el aeropuerto, para que así la ciudad crezca tanto económica como demográficamente.